LADY GREASE

Tan polifacética como la vida misma me ha devuelto el futuro a Lady Grease. Idéntica a un junco en cuerpo y alma, resiste como pocos seres humanos los desplazamientos. Lo intacto se ha pegado a ella como un sello de los antiguos a una carta de correo ordinario y yo he tenido la suerte de poder descubrirlo. Un día estuve ciega, pero hoy soy como aquel señor que citan en la Biblia y he recuperado la vista para encontrarme con una mujer tridimensional que no le tiene miedo a lo que el cuerpo cuenta. Para mí es un hallazgo lo que un día fue una piedra sin valor. Entonces no sabía distinguir el valor de algunas cosas, el valor de algunas personas. Gracias a Dios, un día, mientras algunos hombres cantaban canciones y poemas de amor a los valientes de épocas pasadas, tuve la suerte de convertirme en una experta en piedras preciosas. Ah! Se me olvidaba decir que se lima las uñas como nadie!